Eso que llaman "democracia"

fororepublicano.wordpress.com

La ultima vez que vi "Tolerancia cero", recuerdo que uno de los panelistas exhibió un libro titulado "Los mitos de la democracia chilena" de Felipe Portales. No voy a comentar acerca del libro pues no lo he leído ni lo he tenido en mis manos, pero en virtud de los acontecimientos viene la idea: ¿Estamos en democracia? ¿Que fue lo que ganamos tras el fin del régimen militar, dictadura o como quiera llamarlo?
Abraham Lincoln nos grabó como a fuego en nuestro inconsciente que "la democracia es el gobierno del pueblo, para el pueblo y por el pueblo", pero vemos que al pueblo poco y nada se le toma en cuenta: no participamos en la postulación de candidatos para los cargos públicos, no podemos proponer iniciativas legales, no nos toman en cuenta cuando proponemos ideas o demandas, todo se torna burocrático o engorroso; y para colmo, debemos pagar por todo. Y Platón nos ha dejado la idea que "La política es el arte de gobernar a los hombres con su consentimiento"... ¿el consentimiento ciudadano? En ningún momento he visto que a nosotros nos consulten por ejemplo, la venta de las sanitarias o la construcción de represas en la Patagonia. Conclusión: a nuestros dirigentes políticos les falta cultura cívica.
Nuestra carta fundamental nos habla que nuestro país es una democracia representativa (artículo 4), eso significa que como ciudadanos libres e informados tenemos la facultad de elegir a personas que cumplirán la función de dirigir las políticas de estado para el bien de todos. Sin embargo, en la práctica vemos con rabia que este principio no se respeta en su totalidad: nos hemos convertido simplemente en un ratificador de decisiones políticas de partidos políticos llevado a cabo entre cuatro paredes. Por otro lado, nuestros representantes sólo obedecen a los intereses del partido político en el cual militan y a los negocios en los cuales estos hacen sus inversiones; la ciudadanía sólo es importante en los años electorales. Y no olvidemos la ultima reforma constitucional que elimina el requisito de residencia para los postulantes al senado
Eso no es todo, se la puesto de moda una práctica que raya en la burla: la designación para cargos administrativos, entiéndase ministerios, intendencias y gobernaciones; de personeros que ocupan cargos de elección popular (senadores, diputados y alcaldes). ¿A quien representa entonces nuestra democracia? La única respuesta que se me viene ahora es que nuestro país representa cuan pobre es nuestra cultura cívica, que tan fáciles aceptamos estos atropellos institucionales y cuan fácilmente aceptamos las arbitrariedades de la clase política, "tradicion y excelencia desde 1810" (lease lo tachado con tono de ironía)

http://www.izaping.com/11933/
humor-democracia-definicion.html

¿Sabe cuan emparentados están los políticos en Chile? eso se lo dejo de tarea, se va a sorprender al ver que varios ministros o senadores de un bando esta emparentados con los del otro bando. He ahí la frase: "Alianza o Concertación, la misma cuestión". Lo positivo hoy en día, es que la población está abriendo los ojos y se está manifestando, ojalá no olviden todo cuando la hipnosis electoral presente a los mismos de siempre. Me gustaría que en nuestro país, si nos consideramos avanzados al nivel de compararnos con países desarrollados, bienvenido entonces que se implementen instrumentos propios de una democracia: Plebiscito legislativo y revocatorio, Iniciativas populares de legislación, Primarias electorales, Sistemas electorales proporcionales, Regionalización eficaz, Voto informado y voluntario... En definitiva, que el ciudadano tenga las herramientas para participar de la democracia en nuestro país.

Hasta una nueva edición

El poder del voto

Como ciudadanos de nuestro país, podemos expresarnos libremente, ya sea a favor o en contra de las políticas del gobierno, sea del color, orientación, visión (o como quiera llamarle) que sea. Si bien el personaje que goza del poder tiene la humildad de escuchar el clamor popular y hacer los ajustes para gobernar para el pueblo y por el pueblo, también tiene la cara para hacer la vista gorda, ignorar los clamores y suplicas, mandarlos al carajo y gobernar a su antojo, creyendo que lo esta haciendo bien y haciendo caso a los chupamedias que lo alaban. En este segundo caso, las campañas de desinformación y las cortinas de humo son efectivas para distraer a las masas.

Si por alguna casualidad, usted amable lector que nos sigue periódicamente, se encuentra con un gobierno de características similares a las expuestas en el punto dos, es decir, un gobierno que vende todo como liquidación de temporada de tienda por departamento (incluyendo repactaciones unilaterales de cuotas), le puedo decir que afortunadamente tenemos en nuestro poder el antídoto para eliminar estas plagas, a base de elementos tan simples como un lápiz de grafito n°2 y un trozo cuadrilateral fabricado en cartulina: EL VOTO.

Con un simple voto, cualquier ciudadano responsable que se precie de tal puede informarse, averiguar quien tiene vocación de corrupto y quien tiene ganas de ensuciarse las manos como buen trabajador para levantar el país (no confundir con aquellos que se ensucian las manos llevándose la hacienda fiscal para la casa)..

Con el uso responsable de su sufragio y unas buenas dosis de educación para la vida cívica usted puede sacar un sinnúmero de conclusiones:

• Como ciudadano, no esta obligado a reelegir a las mismas personas.
• Los candidatos de las alianzas mas poderosas van a trabajar en beneficio del partido al cual pertenecen, y no de la población a la cual dicen representar.
• En muchas ocasiones, sus candidatos ni siquiera han vivido en la localidad que representan.
• Si son legisladores, no tienen idea de las leyes que aprueban y por tanto suelen cometer infracciones a la ley, ante lo cual finalmente obtienen castigos insignificantes solo por ser una "reputada autoridad".
• Los medios de comunicación les dan más minutos a los candidatos de las alianzas mas poderosas, y apenas dan cabida a los candidatos de menor peso político o independientes.
• Siempre van a aparecer en la papeleta electoral más candidatos que los presentados por los medios de prensa.
• Sospecha de aquellos candidatos que sustentan su candidatura en promesas y/o, en mostrar jingles pegadizos y flayers multicolores. Si no son capaces de pagar las deudas contraídas por promover sus campañas a través de los medios, tampoco van a cumplir sus promesas.
• El voto blanco y el voto nulo, según nuestra ley electoral, sólo tiene un valor estadístico. Olvídese que el SERVEL va a anular una elección si hay un gran número de dichos votos.
• A los gobiernos no les interesa que se inscriban los jovenes: el actual padrón electoral les permite perpetuarse a los mismos grupos políticos. Así, mientras más jóvenes de sectores populares son engañados con historias como "tu voto no sirve de nada", "luchando en la calle te escucharán" y otras historias, los jóvenes afines a los partidos políticos actuales (que son minoría) llegan a hacer filas para inscribirse e inclinan la balanza a su favor.

Por otro lado, es nuestra responsabilidad inscribirnos para votar. Si gana el candidato que usted no quiso que ganara, pero no se inscribió para impedir su elección, no se queje ahora.

Muchas personas dicen "no me inscribo porque salen siempre los mismos", "esta democracia es de cartón", "este sistema lo hacen los ricos", y otras escusas baratas, repetidas y sin un sustento solido... ¿acaso les da miedo combatir a los que ellos llaman sus enemigos usando sus mismas herramientas? Es mas fácil organizar a la comunidad descontenta que alegar sentado cómodamente en un sillón con un teclado en las manos, como lo hacen los pseudoanarquistas de facebook (¿que hace un anarquista con una cuenta registrada en facebook, aparte de llenarle los bolsillos de Mark Zuckeberg? ¡Es estúpido!)

Así, invito a quienes tienen el apreciado derecho a votar en las próximas elecciones: Infórmese bien, haga un lado los rayados y afiches que no tienen contenidos y busque las motivaciones de nuestros eventuales gobernantes y representantes. Elija a quien estime como el más idóneo a su pensamiento, y no se deje llevar por voladores de luces: Si es audaz, recuerde que ser ciudadano no significa solo que puede elegir, tambien puede ser electo.

Hasta una nueva edición.