En esta semana de trabajo, un alumno de un liceo técnico me hizo la siguiente pregunta antes de iniciar las clases: "profesor, ¿para que me sirve a mi la historia, si voy a dedicarme a trabajar en un taller?". Quizás para el, por su juventud y su mirada objetiva destinada a ser un profesional técnico considere que el conocimiento histórico no es útil para su actividad profesional; sin embargo, esta olvidando que ante todo, el es un ser humano inmerso en una sociedad que evoluciona y que hay que estar atento a esos cambios para no quedar postergado.
La verdad de las cosas es que da pena darse cuenta de esa visión tan miope y cerrada de las cosas, en especial cuando lo que uno como profesor enseña no es solo historia, sino que es Ciencias Sociales, una disciplina que orienta las relaciones sociales, el funcionamiento de la economía, el conocimiento del entorno y el conocimiento de todo lo que el ser humano ha creado gracias a su inteligencia.
Frente a una pregunta que parece simple e ingenua, disponer de unos pocos minutos para responderla no es suficiente; la respuesta, por mas que uno sea un profesional especialista, no va a ser suficiente. Sonara como ideal filosófico, pero considero que es prudente que cada uno sea capaz de hallar su respuesta, siempre y cuando tenga la verdadera intención de hacerlo. Solo puedo decir, humildemente, que la historia es la disciplina del conocimiento a lo largo del tiempo. Una vez que uno crea su plataforma, estamos en condiciones de pensar, cuestionar, criticar, valorar y forjar su propia opinión (por lo menos, así lo entiendo... no se ustedes).
Hasta una nueva edición.